Las empresas que utilizan una estructura modular, a menudo alineada con los principios de Jamstack, tienen una implementación significativamente más rápida de nuevas funciones en comparación con sus competidores.
Pero, ¿sabes por qué el enfoque componible brinda más resultados y agilidad? La respuesta es que uno de sus elementos clave son las aplicaciones componibles.
¿Qué son las aplicaciones componibles?
Las aplicaciones componibles son una de las principales tendencias tecnológicas para la aceleración digital en nuestra economía hiperconectada, altamente dependiente del software y con una falta de talento técnico para mantenerse al día con el crecimiento del mercado.
Las aplicaciones componibles, como parte de una estrategia empresarial, también juegan un papel importante para los desarrolladores:
Hacen posible reutilizar soluciones o códigos existentes. Es decir, no hay necesidad de desarrollar desde cero.
Las aplicaciones componibles se construyen con bloques de construcción reutilizables. ¿Recuerdas cuando jugabas con Lego y podías usar las piezas para ensamblar, desmontar y crear lo que quisieras con ellas? De manera muy simplificada, las aplicaciones componibles tienen el mismo principio.
Como las aplicaciones componibles pueden crearse reutilizando piezas de código o soluciones existentes como si fueran módulos, es posible construir nuevas aplicaciones uniendo piezas más pequeñas en lugar de hacerlas desde cero. El resultado es más agilidad, innovación y adaptabilidad para las operaciones comerciales. Un ejemplo práctico sería un proceso en el que puedes reutilizar funciones de bibliotecas existentes como componentes para construir tus aplicaciones.
Las aplicaciones componibles permiten esto mediante el ensamblaje y la combinación de bloques de construcción de aplicaciones que ya han sido adoptadas o desarrolladas. En términos simples, los bloques de construcción son unidades funcionales, componentes que tienen funciones específicas, que al unirse forman aplicaciones complejas y compuestas.
¿Cómo funcionan los bloques de construcción?
El concepto de aplicaciones componibles se basa en la posibilidad de dividir una aplicación en bloques de construcción para ser reutilizados, por lo que no son más que aplicaciones que funcionan de forma independiente o pueden estar vinculadas a otras.
Veamos un ejemplo de cómo pueden funcionar los bloques de construcción. En la imagen de abajo, hay un conjunto de bloques de construcción trabajando de diferentes maneras y con funciones específicas: como aplicaciones autónomas o, cuando se unen y vinculan, como aplicaciones compuestas y complejas.
- Aplicaciones autónomas: cada aplicación encapsula capacidades comerciales específicas como contrato, cliente, proyecto y gestión de datos relacionados.
- Aplicaciones componibles simples: aplicaciones compuestas aprovechando las interacciones entre varias aplicaciones autónomas para lograr funcionalidad empresarial.
- Aplicaciones complejas: aplicaciones compuestas que reúnen funcionalidades de varias aplicaciones simples y autónomas.
Dado que las aplicaciones componibles están hechas de partes reutilizables, pueden dividirse en piezas. Aquí hay un ejemplo.
El ejemplo anterior es una aplicación componible que comprende tres aplicaciones autónomas vinculadas: una para listar contactos, otra para listar clientes y la última para listar pedidos de clientes. Cada una utiliza un método diferente para obtener datos, pero el componente front-end utilizado para ensamblar la visualización de la página es el mismo, adaptándose al contenido entregado por las API.
Cada una de estas aplicaciones es independiente y puede ejecutarse por sí sola o vincularse a otras para crear nuevas. Aún así, la parte más interesante es precisamente el poder que la plataforma de desarrollo que elijas puede darte para construirlas y permitirte reutilizarlas como bloques de construcción para crear aplicaciones más potentes de manera más simple—una plataforma de edge computing como la de Azion, por ejemplo.
Un detalle importante: además de la posibilidad de estar unidas, estas piezas pueden transmitir datos entre sí, por lo que parecen una sola aplicación—otro concepto fundamental detrás de las aplicaciones componibles.
Y a diferencia de las aplicaciones monolíticas, que se centran en un número específico de resultados y patrones de uso, las aplicaciones componibles permiten una amplia gama de casos de uso y resultados.
¿Cuáles son los beneficios de las aplicaciones componibles?
¿Cuál es el valor de adoptar aplicaciones componibles en una organización? Aquí hay algunos:
1. Permiten la agilidad empresarial
Las aplicaciones componibles admiten construcciones, configuraciones e implementaciones más rápidas, acelerando el tiempo de llegada al mercado y el camino hacia el valor financiero al construir o integrar ecosistemas digitales.
2. Permiten el desarrollo ciudadano
Las aplicaciones componibles son una forma de superar la escasez de desarrolladores a través de herramientas sin código/bajo código, que permiten incluso a empleados no técnicos crear software sin escribir código.
3. Mejoran la experiencia del desarrollador
Con las aplicaciones componibles, los desarrolladores pueden centrarse en crear una experiencia de usuario de primera clase mientras el negocio gestiona el acceso al contenido correcto en el contexto correcto para el cliente correcto. Cualquier sistema, independientemente de si escala o no, puede incluirse ya que las aplicaciones componibles dan a los desarrolladores la libertad de configurar las API necesarias para sus aplicaciones.
¿De dónde surgió la necesidad de aplicaciones componibles?
La necesidad surgió de una sucesión de eventos—como la pandemia de Covid-19, cambios muy rápidos y la economía hiperconectada—que expusieron cómo todo está íntimamente conectado y cómo situaciones al otro lado del mundo nos afectan casi instantáneamente.
Este escenario afectó las operaciones comerciales. Hoy, las empresas que quieren estar preparadas para la huella digital-first de la transformación digital total necesitan ofrecer innovación y reaccionar rápidamente para responder a la aceleración y adaptarse a los cambios y demandas del mercado.
En un mundo donde todo necesita ser digital y necesita software, las aplicaciones componibles reconfigurables y extensibles aparecen como una parte fundamental del engranaje de digitalización, ya que las aplicaciones monolíticas tradicionales son complejas, difíciles de mantener y actualizar, y generalmente requieren mucho tiempo y esfuerzo para su desarrollo y mantenimiento. Además, generalmente son menos escalables y flexibles, lo que dificulta la adaptación a los cambios en el entorno empresarial.
En este escenario, muchas empresas buscan implementar lo que Gartner llama empresa componible, un tipo de organización que entrega resultados adaptando los requisitos comerciales al ritmo de los cambios del mercado.1
Y esto es parte del modelo de negocio componible2, que permite a las empresas tradicionales modernizar su hoja de ruta de TI y mantener operaciones a través de soluciones que orquestan el ecosistema de aplicaciones de manera totalmente integrada, de forma segura y sin perder tiempo de llegada al mercado.
Caso de uso de aplicación componible
La seguridad a menudo es una preocupación importante en muchas organizaciones, así que veamos un caso de uso de una aplicación componible para una solución de seguridad en la plataforma edge de Azion.
Un ejemplo es una aplicación de autenticación de usuario representada por una Edge Function en la plataforma de Azion, que verifica que el usuario es válido usando Tokens JWT y los autoriza a seguir el flujo. Esta función puede combinarse con otra Edge Function que implementa otra aplicación componible.
A continuación se muestra el código para un punto final de API de Edge Function que recibe un POST con los datos de inicio de sesión de un usuario y, con eso, accede a una base de datos, verifica si el cliente existe y, de ser así, devuelve un token de sesión del usuario.
async function handleRequest(event) {
let form;
let responseBody;
let statusCode = 200;
try {
form = await event.request.json();
} catch (err) {
responseBody = JSON.stringify({
"errorCode": "form001"
});
statusCode = 400;
}
if (!form || !form.login || !form.password) {
responseBody = JSON.stringify({
"errorCode": "setOwnIDData002"
});
statusCode = 400;
}
if (!responseBody) {
try {
let loginData = await fetch("https://your.db.service", {
body: JSON.stringify(form),
headers: {
accept: "application/json",
authorization: `Bearer ${event.args.fauna_token}`,
"content-type": "application/json",
},
method: "POST"
});
if (login_data) {
responseBody = generateJWT(loginData);
statusCode = 200;
} else {
responseBody = JSON.stringify({
"errorCode": "userNotFound"
});
statusCode = 400;
}
} catch (err) {
responseBody = JSON.stringify({
"errorCode": "login001"
});
statusCode = 400;
}
}
return new Response(responseBody, {
headers: {
"content-type": "application/json"
},
status: statusCode
});
}
addEventListener("fetch", event => {
return event.respondWith(handleRequest(event));
});
Las aplicaciones componibles, más potentes en el edge
Azion trabaja continuamente para ofrecer herramientas que faciliten y agilicen el trabajo de los desarrolladores. Por ello, nuestra plataforma de edge fue desarrollada para hacer posible construir o reutilizar aplicaciones de una manera simple y práctica, sin vendor lock-in (dependencia del proveedor).
Además, el edge hace posible que existan nuevas formas de que los desarrolladores creen aplicaciones más personalizadas, eficientes y escalables, además de acelerar las oportunidades comerciales. Con Azion, puedes enfocarte en lo que necesitas y nosotros nos encargamos de todo lo demás.
Puedes crear o reutilizar aplicaciones componibles tanto de bibliotecas gratuitas existentes en nuestro Marketplace como de aplicaciones o bibliotecas de terceros, usándolas en una aplicación nueva o existente en nuestra plataforma. Ve algunos ejemplos aquí en nuestra documentación.
Si aún no usas nuestra plataforma, puedes probarla ahora. ¡Es gratis!
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